Un instructor de buceo alemán estaba paseando con su hija por una playa de la isla de Titikaveka, en las Islas Cook, en el Pacífico, cuando realizó un extraño hallazgo: una anguila marina que había muerto sofocada al intentar tragar un pez globo que se infló en su boca.
Tim Mayer relató que en un principio creyó que se trataba se un trozo de madera sobre la arena; sin embargo, al acercarse se percató de que lo que tenía delante era una anguila de más de 1,2 metros de largo que había muerto cuando intentaba alimentarse.
Greedy eel found washed up with inflated puffer fish lodged down throat https://t.co/gnZOjBlde7 via @MailOnline
— Kennedy News and Media (@Kennedy__News) October 7, 2020
«Parece que el pez globo se llevó lo mejor de la anguila, pero ambos pagaron el precio final. Y justo detrás de ellos, un arco iris se hundía en el horizonte. Era surrealista», señaló Mayer sobre la escena que presenció.