El director científico de Regeneron Pharmaceuticals, el científico grecoestadounidense George Yancopoulos, ha ofrecido nuevos detalles sobre el cóctel de anticuerpos contra el coronavirus que creó y se utilizó con el presidente de EE.UU., Donald Trump, en una entrevista concedida a I Kathimeriní publicada el pasado viernes.
Yancopoulos explicó que el 1 de octubre la Casa Blanca se puso en contacto con su compañía y, tras largas discusiones con su equipo médico, recibieron la autorización de emergencia de la Administración de Medicamentos y Alimentos estadounidense.
«El candidato ideal»
Asimismo, subrayó que este último factor es esencial, por lo que dicho tratamiento no es recomendable para personas que tienen un alto riesgo de efectos secundarios de la enfermedad debido a la edad o a problemas de salud subyacentes.
El científico aseguró que el mencionado cóctel puede reducir el nivel de carga viral en un 99 %, añadiendo que la protección que proporciona dura varios meses.
¿Cóctel o vacuna?
Por otro lado, el creador del REGN-COV2 dijo que los anticuerpos se administran a personas que ya están contagiadas para tratarlas, a diferencia de una vacuna, cuya finalidad es proteger a la gente para que no se infecte y se puede administrar a millones de personas en todo el mundo, algo imposible con dicho cóctel. «Una vacuna es más útil porque contribuirá a construir un poderoso muro de inmunidad contra el virus», aseveró, aunque reconoció que siempre existen personas vulnerables o ancianas, para las que la vacuna tiene una efectividad menor.
Yancopoulos indicó que en la actualidad son capaces de producir casi 100.000 dosis del cóctel de anticuerpos de manera mensual, aunque admite que no es suficiente. No obstante, a partir de enero planean producir 250.000 dosis o más al mes gracias a la colaboración con la farmacéutica Roche.
«La batalla contra el covid-19»
«Tenemos muchos casos nuevos todos los días y muchos pacientes mueren después de presentar complicaciones de la enfermedad», comentó el científico. «Es por eso que Estados Unidos, como el resto del mundo, necesita tratamientos y una vacuna», añadió.