Una mujer embarazada fue asesinada el pasado sábado en Filadelfia (Pensilvania, EE.UU.) tras celebrar su ‘baby shower’, informan medios locales.
Jessica Covington, una mujer de 32 años que estaba embarazada de 7 meses, fue tiroteada después de las 20:30 (hora local), siendo alcanzada varias veces en la cabeza y en el estómago por disparos. Según la subcomisaria de la Policía local, Christine Coulter, la mujer acababa de salir de su fiesta prenatal y estaba descargando los regalos de su vehículo cuando sonaron los disparos.
Covington fue llevada al hospital, donde tanto ella como su hijo nonato, fueron declarados muertos poco después de las 21:00.
El domingo, el alcalde de Filadelfia Jim Kenney publicó un tuit sobre el tiroteo y escribió que la ciudad ofrece una recompensa de 50.000 dólares por información que conduzca a la detención del culpable.
Según The Philadelphia Inquirer, la Policía de Filadelfia interrogó este lunes a un sospechoso por el asesinato, pero los investigadores afirman que aún están recogiendo pruebas y que no se han presentado cargos.
Por su parte, Larry Krasner, el fiscal del distrito, señaló que es «muy probable» que quien sea acusado en relación con el asesinato se enfrente a dos cargos de homicidio, uno por la madre y otro por su hijo.
